Una nueva vivienda en menos de 24 horas
Uno de los sistemas constructivos industrializados utilizados para aumentar la altura de edificios existentes se basa en estructuras de madera. Su ligereza, el bajo impacto ambiental, la facilidad de mecanización, la ausencia de toxicidad y la calidez cuando queda a la vista, hacen de la madera una opción industrial de alta calidad constructiva.
Es por esta razón que en la remonta que realizamos en un edificio emplazado en la Rambla de Poblenou de Barcelona se plantease con una estructura de madera prefabricada. Ésta conseguiría absorber las nuevas cargas en la estructura existente, sin tener que reforzar los cimientos del edificio con más de 100 años de historia.
El proyecto arquitectónico acabó convirtiéndose en el planteamiento de un puzle constructivo, en el que había que definir el despiece y el montaje, donde todas y cada una de las piezas debían encajar de forma precisa. Por este motivo, se optó por la construcción offsite de la gran mayoría de elementos que conformaban forjados, paramentos y cubierta en una nave, para luego trasladar todas las piezas a su emplazamiento definitivo, y en uno único día.
Para poder sobreelevar el que luego sería el nuevo ático del edificio, fue necesario emplear una grúa con un largo brazo. Esto obligó a ocupar parte de la calzada y cerrar el tráfico por seguridad. Por esta razón, esta actividad tuvo que hacerse en apenas 18 horas consecutivas, convirtiéndose en toda una experiencia tanto para el equipo y los vecinos, como para cualquier paseante ocasional que pudo ver en vivo la operación de remonta.
Uno de los sistemas constructivos industrializados utilizados para aumentar la altura de edificios existentes se basa en estructuras de madera. Su ligereza, el bajo impacto ambiental, la facilidad de mecanización, la ausencia de toxicidad y la calidez cuando queda a la vista, hacen de la madera una opción industrial de alta calidad constructiva.
Es por esta razón que en la remonta que realizamos en un edificio emplazado en la Rambla de Poblenou de Barcelona se plantease con una estructura de madera prefabricada. Ésta conseguiría absorber las nuevas cargas en la estructura existente, sin tener que reforzar los cimientos del edificio con más de 100 años de historia.
El proyecto arquitectónico acabó convirtiéndose en el planteamiento de un puzle constructivo, en el que había que definir el despiece y el montaje, donde todas y cada una de las piezas debían encajar de forma precisa. Por este motivo, se optó por la construcción offsite de la gran mayoría de elementos que conformaban forjados, paramentos y cubierta en una nave, para luego trasladar todas las piezas a su emplazamiento definitivo, y en uno único día.
Para poder sobreelevar el que luego sería el nuevo ático del edificio, fue necesario emplear una grúa con un largo brazo. Esto obligó a ocupar parte de la calzada y cerrar el tráfico por seguridad. Por esta razón, esta actividad tuvo que hacerse en apenas 18 horas consecutivas, convirtiéndose en toda una experiencia tanto para el equipo y los vecinos, como para cualquier paseante ocasional que pudo ver en vivo la operación de remonta.